Primer día de trabajo, que emoción. Te despiertas y no lo puedes creer, ya eres una persona profesional. Te lavas tus dientes, la cara, desayunas bien, eliges la ropa perfecta para la ocasión y te dispones a comenzar con todo esta nueva etapa de tu vida.
De ida al trabajo, piensas en lo increíble que va a ser esta oportunidad.
Te darán tareas, podrás aplicar lo aprendido en la universidad, hasta inclusive puede que conozcas a alguien y se vuelva tu mejor amigo o amiga en la oficina.
Llegas, entras por la puerta y notas algo extraño. Miradas de reojo, personas que parecen estar observándote, algunos inclusive te siguen con la mirada o te la vuelcan.
Algo raro está pasando y piensas.
¿Por qué todos tan serios? ¿No deberían estar felices de estar trabajando en esta oficina?
Y es que algo sucede en esa oficina.
Escondidos en las entrañas de esas empresas, hay una serie de personajes de lo más variopintos, que están convirtiendo el ambiente de la oficina en algo tedioso, aburrido y hasta estresante.
Unos personajes, que de no saber cómo reconocerlos, podrán absorberte, convertirte en algo similar a ellos, corromperte o hasta conspirar en contra tuyo.
Tu misión: Descubrir desde el primer día a este tipo de personas, evitarlos y/o aprender a lidiar con ellos antes de que sea tarde.
[bctt tweet=»Personas que deberías evitar en tu trabajo desde el primer día»]
EL ABUSIVO
¿Cómo reconocerlo?
Usualmente esta persona desde el primer día de trabajo, se presenta como alguien amigable, pero ya hace algún chiste sobre tu persona. Que tu peluquero es Jack el Destripados, que si tu madre te vistió para salir de la oficina o se ríe cuando dices alguna frase o anécdota con una expresión de superioridad.
Y es que el abusivo lo tiene bien en claro. Desde el primer día te va a tender un aro psicológico, el tratar de intimidarte y si caes en el, perfecto; ya te tiene.
¿Qué hacer?
En primer lugar recuerda que es un infeliz.
Así, es, es una persona que no tiene felicidad y por eso es un infeliz. Por esa razón necesita hacer que otros se sientan más infelices. Así que el primer consejo es que no caigas en su juego y piensa que es un pobre idiota.
Lo segundo, recuerda que puede que tenga miedo.
Seguramente viste que en las películas (o en la vida real) el abusivo suele ser ese personaje que usa su fuerza bruta, pero de cerebro, ni hablemos. Típico en las películas que sea el deportista estrella que se la pasa jugando, bebiendo y nunca estudia.
Y es que muchos abusivos son así. Invierten poco en su educación o formación y cuando alguien nuevo entra en su territorio, con estas ventajas, se siente intimidado.
Así que tienes que entender esto antes de sentirte mal con su actitud.
Así que haga lo que haga, aprende a responderle, a no caer en sus trucos psicológicos e inclusive a busca responderle de modo gracioso (sin ser agresivo, porque es lo que busca) como si realmente no tuviesen efectos en ti sus mensajes.
EL TRAFICANTE DE CHISMES
¿Cómo reconocerlo?
En verdad a este personaje más que reconocerlo, se lo huele a la distancia. Es tan evidente que es posible que desde el primer día se acerque a ti y ya te esté contando de quién tienes que cuidarte o sobre la vida de algunos compañeros.
Muchas personas confunden a los chismosos con alguien que les está brindando un secreto a modo de amistad, pero esta es su estrategia. Tú crees que está confiando en ti, pero en verdad lo hace así porque sabe que creerás que es tu amigo.
El chismoso solo tiene un objetivo. Como sabe que la información es poder, el se encarga de traficar la misma por la oficina, creando un ambiente horripilante, incómodo para todos y donde él queda con un rol de poder. Poder que cree, algún día tendrá resultados cuando todos se vayan y el quede solo en la oficina.
¿Qué hacer?
Si quieres escuchar sobre los demás, escucha. Pero trata de no interactuar con él. Usualmente este personaje tiende a contarte algo y luego te pregunta algo, esperando así tener un intercambio de información. El sabe que eres una persona nueva y le intimida no conocer nada sobre ti, por eso necesita el poder de la información que le des.
Así que simplemente. No le cuentes nada sobre tu vida personal, íntima o fuera de la oficina. Es más, preferible que el chismoso te vea como alguien poco interesante, a que te vea como alguien intimidante.
Y es que es así. Obtiene información, la analiza, mide que tan intimidante podrías ser, saca lo peor de esa información y la divulga para atacarte como una rata de alcantarilla.
¿Cómo reconocerlo?
Desde la distancia parece ser el trabajador ejemplar. Buena presencia, una gran sonrisa o mirada al estilo héroe. Sin embargo descubrirás que es un ególatra cuando se acerque a ti y de antemano se ofrezca a enseñarte todos los secretos para crecer en la oficina.
También notarás que cada vez que hablan, siempre sale a la luz alguna hazaña, logro o triunfo que él hizo y que nadie más pudo.
El problema es que esta persona en verdad no busca ayudarte, solo busca aumentar su ego teniendo por debajo alguien inferior (Así que te hace sentir como tal) e inclusive puede que hasta quiera adoptarte como su asistente personal, sin derechos, sin beneficios, sin gracias, sin ayuda, etc.
¿Qué hacer?
Simple, no le sigas la corriente. No dejes que sus hazañas, logros o triunfos te intimiden.
Nuevamente, piensa que es una persona que tiene miedo a que alguien realmente mejor que él venga y le quite su imagen (porque algunas veces ni tiene logros).
Así que trata de evitarlo, dile que tienes tu modo de hacer las cosas, deriva la charla a otro tema, pero no dejes que la atención se concentre en él, sus consejos, sus enseñanzas o la historia de cómo rescató a una princesa de una torre encantada matando a un gran dragón morado.
¿Cómo reconocerlo?
Es simple, nunca hace nada.
Sea la hora que sea cuando lo mires, notarás que puede simular que trabaja y en realidad no lo está haciendo.
Pasa largos períodos de tiempo en el baño o sus descansos que deberían durar 10 minutos se extienden hasta los 45 minutos.
Esta persona es una especie de asteroide que se mueve alrededor de la oficina sin rumbo, sin sentido, solo está ahí, flotando e inclusive atrayendo a su órbita a los demás.
¿Qué hacer?
Simplemente no dejes que influya en ti.
Si aparece de repente al lado tuyo, dile que estás ocupado.
Si en el descanso se te pone a hablar, dile que tienes que volver a tu trabajo.
No suelen ser personas que se enojen mucho si no tienes tiempo, ellos solos tratan de encontrar a alguien similar, así que no le demuestre nada que parezca que eres un flojo y con eso podrás prevenir su influencia negativa.
¿Cómo reconocerlo?
He dejado para el final a la pero criatura de la jungla de las empresas, una fiera que realmente ha cazado más víctimas que el peor animal conocido por el hombre.
El cazador, tiene una gran ventaja. El camuflaje.
Así es, un día será tu amigo, otro día será el chismoso, otro día el ególatra o inclusive el flojo. El conspirador tiene la habilidad de ponerse en diferentes roles para tratar de caerte bien o acercarte a ti.
La mejor forma de reconocerlo es por su incongruencia. Pasa de un estado emocional a otro. Un día es una mosquita muerta y al otro te enteras de que por su culpa despidieron a un compañero de trabajo.
Te molesta todos los días y todos los odian, pero parece que tu jefe lo adora.
Es que el cazador sea camufla para parecerse a todos, pero eso también revela su naturaleza. La falta de congruencia.
Lo que quieres es cazarlos a todos, convertirse en el dueño, amo y señor de la oficina y que todos le teman.
El quiere ser el rey de la jungla.
¿Qué hacer?
Primero, descubrirlo cuanto antes.
El primer rasgo es la incongruencia. Incongruencia que se nota día a día y hasta puede que contigo un día sea de un modo y al otro día del otro.
Lo que debes hacer es mantenerte alejado, no dejar que se te apegue, porque mientras más cerca esté de ti, más aprenderá.
Deberás ser cambiante como él, deberás confundirlo. Un día estar alegre, al otro triste, un día ser cordial y al otro distante.
Usualmente el cazador cuando se siente intimidado se puede (no es seguro) alejar.
Así que solo te queda una opción.
Intimidarlo.
Demostrarle que eres mejor cazador, que eres más profesional, que tienes mayor presencia o fuerza mental.
En resumen, deberás ser una pared que resista todos sus ataques y esperar que esta persona se desmotive, busque otra víctima o simplemente se sienta intimidado.
Pero mucho cuidado… el cazador muchas veces tiene un arma poderosa en sus espaldas. Cultiva relaciones de poder y es que muchas veces viene de ese entorno.
Hijos de dueños, familiares cercanos, sobrinos de algún socio. Ten cuidado, porque ellos vienen, de otra case de jungla mucho más complicada y aplican sus reglas a tu ambiente.
En resumen, ante un cazador, que gane el más fuerte.
Y tú ¿Conoces algún otro tipo de persona al que se debería evitar en una oficina?
Muchas gracias por tu tiempo.
Mariano Cabrera Lanfranconi (mclanfranconi)
Claro, que no se trata sino de rasgos muy generales, en cada fuente de trabajo hay personas particulares que se acercan a estos modelos, pero no existen en todos los trabajos.
Este articulo es muy interesante, la manera en que etiquetas las diferentes personalidades que pueden surgir dentro de un ambiente de trabajo, sin embargo considero que lo describes en base a tu experiencia propia y carece de argumentos científicos y sustentables como para asegurar que así sea.
Si alguien entra a leer esto y es muy susceptible a la información que lee en Internet lo único que generaras sera que el se cree una mala impresión de una persona dentro de su nuevo trabajo, lo que a su vez generara un problema o un mal entendido.
Como por ejemplo la egolatría es un tema muy profundo como para abordarlo de la manera como tu lo tratas en este articulo, si te das cuenta pareciera que tuviese unas cuantas características de un líder como lo señalas en otras de tus lecturas, sin embargo por que una persona se acerque a ti y te quiera ayudar en tu nuevo empleo no siempre significa lo que tu mencionas.
En general tus lecturas son buenas, aunque te invito a que indagas mas sobre algunos temas e identifique el impacto que estos pueden generar en algunas personas, el Internet y los foros son armas muy peligrosas.
saludos.
Estimado Oscar, gracias por tu comentario.
En verdad es cierto lo que dices, hay que tener cuidado en un trabajo y no necesariamente TODAS las personas que nos encontramos allí van a caer en estos estereotipos, sin embargo el sustento está en muchas experiencias propias, compartidas e inclusive generadas tras consultorias.
Con esto me refiero a que no necesariamente en el 100% de los trabajos nos encontraremos con estos personas, pero si es probable por lo menos encontrar alguna y saber reconocer sus intenciones.
Gracias por tu comentario.